En la actualidad vivimos en una sociedad donde el modelo biologicista encabeza la salud mental de nuestro país. Muchas de las patologías psicológicas están tratandose con psicofarmacos debido a la escaces de recursos asistenciales de los que se dispone. Gran parte de nuestra sociedad está tomando ansiolíticos, antidepresivos u otros psicofarmacos pensando que esto les curará. Los psicofarmacos sirven para aliviar a la persona del síntoma que padece, pero no para eliminar la fuente de malestar. Es decir, si una persona sufre de ansiedad, un ansiolitico le reducirá la ansiedad, pero esta persona el dia que deje de tomar la medicación, si no ha hecho nada al respeto, volverá a padecerla. Aquí es donde tiene lugar la psicoterapia, ayudando a las personas a entender el funcionamiento mental que les ha llevado a generar ese síntoma, para así poder gestionar aspectos de su vida que les generen bienestar.
Tenemos que saber que detrás del modelo biologicista hay la industria farmacéutica, que hace investigación para crear nuevos fármacos con el fin de ganar dinero. A veces parece que el fin dificulta la buena praxis del trabajo.
Aquí les dejo un articulo publicado por el Infocop, revista del Consejo General de la Psicología de España, donde nos muestra que la validez del modelo farmacológico que impera nuestros días para tratar los trastornos mentales es muy cuestionable.